Bogotá D.C., 29 de abril de 2019 : Luego de más de ocho
horas de debate, del estudio de alrededor de diez impedimentos y la
presentación de siete recusaciones, la plenaria del Senado decidió levantar la
sesión y aplazar para mañana, a las 2 de la tarde, el debate de las objeciones
presidenciales al proyecto de ley estatutaria sobre la Jurisdicción Especial
para la Paz, JEP.
La sesión se inició, cerca de la 1 de la tarde, con la
presentación y el estudio de los impedimentos presentados por los senadores
Moisés Besaile, Andrés García y Felipe Lemos, partido de la U; Pablo Catatumbo,
Julián Gallo, Griselda Lobo y Victoria Sandino, de las Farc; Alejandro Corrales
y Honorio Henríquez, de Centro Democrático, y Arturo Char, de Cambio radical,
entre otros.
Sin embargo, cuando la plenaria avanzaba a buen ritmo y ya
había sido evacuado un buen número de dichas solicitudes, fue necesario volver
a ponerlas a consideración por cuanto se presentó una confusión relacionada con
la participación en la votación de algunos impedidos, quienes salían del recinto
mientras se les resolvía su petición.
En la reapertura de la misma, los senadores Paola Holguín,
Álvaro Uribe, María del Rosario Guerra y Carlos Felipe Mejía, del Centro
Democrático, pidieron que se les revocara impedimentos presentados meses atrás,
por cuanto ya no existían razones para mantener esa situación, a lo cual la
plenaria accedió.
A esa altura del debate, el presidente del Senado, Ernesto
Macías, tras conocer que no había nuevos impedimentos en la Secretaría General,
anunció que recusaba al congresista Iván Cepeda, del Polo Democrático, toda vez
que la esposa del legislador laboraba en la JEP y además había cumplido algunas
funciones en el proceso de negociación del proceso de Paz con las Farc, en La
Habana.
Además argumentó que el senador Cepeda había entregado
algunas declaraciones públicas sobre su posición frente a las objeciones a la
JEP, pese, según dijo, a estar impedido, por los motivos ya señalados.
Ante esta nueva situación, el senador Cepeda pidió la palabra
y dijo que no se había declarado impedido, por cuanto su esposa era contratista
de la JEP y su labor no se relacionaba con lo que iba a debatir en la plenaria.
Esta recusación generó una serie de intervenciones de la
oposición y de los partidos simpatizantes al Gobierno.
El senador Roy Barreras dijo que como él también tenía
conocimiento de que sería recusado por haber sido parte del equipo negociador
del Gobierno del expresidente Juan Manuel Santos, en los acuerdos de la Habana,
procedía a recusar al senador Álvaro Uribe por ser el negociador del NO y al
Presidente del Senado por presentar una tutela ante al Consejo Superior de la
Judicatura relacionada con las objeciones a la JEP.
Posteriormente se registraron nuevas recusaciones hasta
contemplar un total de siete.
Para pemitir que la plenaria fluyera y no se empantanara se
les propuso a los autores de las recusaciones retirarlas, pero como ello no se
logró se recordó que la única instancia que tenía facultad para resolver dichas
recusaciones era la Comisión de Ética del Senado.
Ante esto, el presidente de esa célula legislativa, Miguel
Ángel Pinto, presente en el recinto de la plenaria, citó a la 9:00 a.m. a la
Comisión y a las 9:30 a los senadores recusados para analizar esas situaciones,
para posteriormente informar al Senado en pleno sobre la decisión adoptada.
Frente al nuevo escenario, la senadora Myriam Paredes,
partido Conservador, presentó una proposición en la que solicitó levantar la
sesión y que se convocara para mañana, a las 2 de la tarde, a la plenaria para
continuar con la discusión de las objeciones a la JEP. La proposición fue
puesta a consideración de la plenaria, la cual fue avalada de manera
mayoritaria. De esa forma se espera que mañana en la tarde, tras la presentación de los dos informes sobre
las objeciones a la Jep, se proceda a votar y a evacuar ese tema y se de paso al estudio y discución del Plan Nacional de Desarrollo. Fuente: Senado de la República. Hay Más.-